12.Estoy contenta

Mi querido amigo:

¿Te has fijado en que las ventanas y los balcones han cobrado vida? Antes parecía que solo los que espiaban al vecino se asomaban, que solo servían para que otros murmuraran (qué palabra más bonita: murmurar, nunca antes lo había pensado). Ahora, por fin, recobraron su color, hay más ropa que nunca tendida al sol, todos te saludan al asomarte, comienzas a saber los nombres de aquellos a los que te referías con un:el de enfrente, la del cuarto izquierda, el del patio de luces. Ahora sabes por fin cómo se llaman: Andrés, que está preocupado porque su madre vive sola y aunque habla con ella a diario, teme por su salud que siempre fue algo delicada, y también conociste a Luz que tiene un perro pequeño y lo utiliza como excusa para acercarse a casa de su novio a llevarle algo de comida hasta la puerta, pues vive solo y es de los denominados «de riesgo» (ella siempre dice que de riesgo somos todos, pero que hay que ser prudentes de todas formas) y a Francisco, del que te han contado que tiene tres pequeños pisos alquilados por una herencia familiar que lo cogió por sorpresa y que ha decidido no cobrarle a sus inquilinos porque sabe que su situación no es buena y él espera poder salir adelante con sus ahorros.
Tengo que dejarte ya. Recibe mi abrazo. #quedateencasa

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