Mi querido amigo:
El otro día te hablaba de las campanas de la Catedral, de que hay momentos en los que no sé muy bien por qué, comienzan a sonar y se pasan un buen rato haciéndolo. He leído que no tiene un motivo especial, los tañedores son una comunidad única, los que se dedican a tañer las campanas de la catedral son un reducido grupo de personas, casi todos tienen sus carreras y lo toman como un hobby, en una entrevista que leí, decían que es una especie de ejercicio que necesita toda tu atención, así que lo comparaban a la meditación, desconectas la mente de tu vida corriente para centrarte y concentrarte en el trabajo de tocar las campanas. Te dejo un poco de su música, espero la disfrutes. Recibe mi abrazo. Cuídate.