Mi querido amigo:

Cómo sabes bien, me gusta la naturaleza y me encantan las flores. Aquí es primavera y las hay de todos los colores y formas. Las calles se llenan de color en primavera y sientes un poco que los problemas se atenúan.
En momentos como este me gustaría viajar en forma de rosa, o de pétalos y acariciar el alma de aquel que se siente triste o está solo. Acercarme a esos jóvenes que destrozan todo a su paso y susurrarles al oído que no todo está perdido, que seguro encontrarán el amor y la paz en su camino, que se tranquilicen, que el mundo lo que necesita es más amor, más caricias, más ternura, más abrazos. Que todos somos distintos, pero todos sufrimos igualmente, que en las diferencias y el respeto está lo que buscan, no en quemar contenedores ni en insultar a su igual, que lean, que lean libros y escuchen la sabiduría de sus mayores antes de que sea demasiado tarde, que besen a sus madres y a sus padres y que sientan el calor en el abrazo.
Recibe el mío y siente su calor. Cuídate.