Mi querido amigo:

Llevo una temporada que no soy capaz de concentrarme en nada, todo me cuesta trabajo, menos escribirte esta carta. Somos animales de costumbres y el cuerpo es el primero que nota los cambios. He vivido en el hemisferio norte casi toda mi vida, ahora vivo en el sur, así que el cambio de estaciones, las fiestas señaladas, todo está cambiado para mí, siempre lo he llevado bien, aunque ahora me cueste más por no poder salir del país.Cuando iba a España de vacaciones era como coger aire fresco, como volver a la normalidad, como tomar fuerzas para volver a cambiar. No sé cómo explicarlo, quizás también sea sólo por la situación actual, que no sé en qué día vivo, ni en qué mes, de pronto abro un ojo y ya estamos en febrero del 21, está pasando muy rápida la vida. Me gustaría quedarme dormida y que al despertar fuese marzo de 2020 y que todo esto hubiese sido un mal sueño.
Recibe mi abrazo. Cuídate.