40.Ya estábamos más tranquilos

Ya estábamos más tranquilos, aunque en un primer momento nos sorprendiera a todos ver a Emily con Thomas, nos alegraba el verlos tan felices juntos. Thomas se había portado siempre bien con nosotras, su ex había sido la que había tenido reparos y a la que nunca le había hecho mucha gracia nuestra amistad, de tal manera que cuando yo había regresado a España obligó a Thomas a que eligiera entre ella y nosotras, bueno, en realidad y Emily, pues yo ya no estaba. Durante una temporada se veían igualmente hasta que un día Lucy le dijo que se iba pues no aguantaba su amistad con Emily, que más que una pareja parecían un trío, y por ahí no pasaba. Así comenzaron a quedar más a menudo, Emily lo consolaba y él se desahogaba, al final una cosa los llevó a la otra y acabaron juntos.

-Resumiendo es más o menos lo que pasó. Al principio, como bien sabes, me caía un poco mal, lo veía un poco entrometido, pero poco a poco me fue cayendo mejor, ya entiendes como son estas cosas, mientras estuviste en coma no perdió el contacto conmigo aunque a Lucy le parecía fatal él la ignoraba. Tú regresaste a España y él fue un poco mi alegría, me reía mucho con él contando anécdotas de cuando estábamos los tres. Un día llegó y se abrazó a mi diciéndome que Lucy se había ido, que lo había dejado. Poco a poco comprendimos que nuestro camino era el mismo, que debíamos hacerlo juntos, y aquí estamos. Un poco sin querer me quedé embarazada pero la verdad que no nos importó, no nos planteamos nada más que tenerlo. Y bueno… here we are!

-Estoy inmensamente feliz por vosotros, estoy segura de que vais a estar muy bien juntos y con un bebé de la edad del mío, ¡es fantástico! Estoy muy emocionada Emily.

-No quiero perder el contacto con vosotros, así que he pensado que para que eso no suceda lo mejor es que seáis los padrinos de mi niña y a Thomas le ha parecido estupendo.

Me abracé de nuevo a ella emocionada.

-Me emocionas, siempre. Eres la mejor amiga que he tenido en mi vida.

-Tranquila que aún hay más. Thomas, ¿ se lo decimos?

Thomas se acercó a nosotras y trajo consigo a Sergio. Al llegar a nuestro lado agarró a Emily por la cintura y Sergio a mí.

-¡Adelante!

-Sergio, le decía a Talara que queremos que seáis los padrinos de nuestro bebé.

Sergio me acarició y yo lo besé.

-Y lo más importante. -Esta vez el que hablaba era Thomas. – Se llamará Talara, si os parece bien.

Las lágrimas comenzaron a resbalar por mis mejillas, besé de nuevo a Sergio y me abracé a Emily y a Thomas dándoles las gracias emocionada.

-Nunca imaginé que alguien iba a llevar mi nombre. Me haces plenamente feliz, bueno, me hacéis. Que se vaya a llamar como yo es el mejor regalo que podíais hacerme.

No podía impedir que las lágrimas cayeran por mis mejillas. Miré a mi madre que también lloraba en silencio, mi nombre siempre había significado mucho para ella.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.