Mi querido amigo:

Siempre te aconsejo que te acerques al mar para cargar tus pilas, o si no puedes, que lo escuches en YouTube, pues tranquiliza, a mí el mar siempre me salva y me da vida, siempre he considerado que cerca de él estoy protegida. Cerrar los ojos, respirar profundo, sentirlo, es regresar a mi origen, a mi hogar, es recobrar mi fuerza, es sentir que sigo viva, que pertenezco a este mundo aunque a veces no tenga claro en qué lugar debo encajar.
Cuando te acercas al mar la luz del cielo cambia, se vuelve intensa, el olor del aire es diferente, fresco, salvaje, la piel también lo nota, se eriza. Pruébalo, siéntelo, sé consciente de lo que ocurre al acercarte a él, sé consciente de lo que sientes.
Recibe mi abrazo. Cuídate.