Finaliza un año que comenzó con muchas ilusiones, quizás no haya sido tan bueno como esperábamos, tal vez hayamos dejado en el camino algún sueño, pero la esperanza debe permanecer, siempre, aún viendo que lo malo camina a nuestro lado.

Acomódate en el lugar que hayas escogido para escucharme. Respira profundamente y siente cómo tu cuerpo va recobrando la calma con cada respiración. Permíteme atraparte con mi voz. Seas bienvenido a Arropando estrellas, un podcast de Bosquina Monzón.

A unas horas de comenzar un nuevo año, hacemos balance de todo lo que nos ha sucedido e intentamos comprender el por qué hemos incumplido parte de nuestros propósitos o por qué no hemos realizado alguno de nuestros sueños. No siempre es fácil de conseguir lo que en un principio nos proponemos, no pasa nada, podremos intentarlo de nuevo.
Este año las metas pueden ser otras y si ponemos nuestro empeño en conseguirlas, quizás lo logremos esta vez.
Lo que posiblemente hayamos conseguido ha sido aprender a relajarnos, importantísimo en momentos difíciles o de crisis. Respirar profundamente es fundamental.

Inténtalo conmigo.

Uno. Inspira cerrando los ojos y al espirar elimina de tu mente ese pensamiento negativo que no te permite avanzar.
Dos. Inspira de nuevo y aleja cualquier pensamiento que te distraiga. 
Concéntrate de nuevo en la respiración.
Tres. Inspira y siente cómo el aire va calmando tus sensaciones.
Cuatro. No te distraigas. Inspira sintiendo cómo se mueve tu cuerpo.
Cinco. Tu respiración fluye profunda, sientes que funciona la relajación.
Seis. Inspira. Los músculos de tu cuerpo se van aflojando.
Siete. La positividad se abre camino en tu mente. Has conseguido alejar cualquier pensamiento negativo.
Ocho. El aire entra y sale sin obstáculos.
Nueve. Inspira y siente hasta tal punto relajado tu cuerpo que notes su peso.
Diez. Con cada inspiración sientes cómo te vas adormeciendo. No luches, déjate llevar.
Once. Regálate un pensamiento positivo.
Doce. Disfruta la relajación. 

Siente cómo tu cuerpo ha ido transformando lo negativo, la tensión, en algo positivo. Doce respiraciones profundas, como las campanadas que nos indican un nuevo cambio.

Desde Arropando estrellas te deseo un año magnífico de positividad y alegría. Disfruta de todo lo que te rodea. Sal más al campo, acércate a una playa, escucha el sonido de los pájaros, el de los árboles, el del mar y siéntelo. Somos privilegiados.

Me despido dándote las gracias por compartir tu tiempo conmigo.
Con algo volveré. Pero hasta aquí, creo, mi etapa de Arropando estrellas.
Descansa.